Unos pocos pasos para cruzar el forat y así disfrutar de las dos comarcas y de nuestro mediterráneo
Los amantes de la montaña tienen una visita obligada, en nuestras propuestas de senderismo mediterráneo, esta vez a la Sierra de Bèrnia donde se sorprenderán con los mejores paisajes de la zona de la Marina Alta y Baixa. Una ruta por esta muralla natural orientada de Este a Oeste que se alza majestuosa hasta una altitud de 1.129 metros separando ambas comarcas alicantinas, tanto física como climáticamente.
Así que ya saben, si les apasiona la naturaleza, tan solo deben ponerse calzado cómodo y ropa adecuada para disfrutar del Sendero PR-V7 Bèrnia. Serán tres horas y media para recorrer, con un grado de dificultad medio-alto, estos 8 kilómetros que les dejará boquiabiertos.
Para acceder a la ruta hay que desplazarse a 1 kilómetro del núcleo urbano de Benissa, dirección Alicante por la N-332, tomando la carretera dirección a Xaló CV-750 y a unos 300 metros, a la izquierda, se encuentra la carretera de acceso Pinos-Bèrnia, CV-749, que les llevará, a unos 16 kilómetros, hasta Les Cases de Bèrnia donde hay que dejar el coche y empezar el itinerario a pie.
El olor a romero, tomillo, manzanilla y lavanda serán los compañeros de este viaje en el que se puede encontrar desde reptiles (como el lagarto ocelado o las diferentes especies de serpientes) halcones peregrinos o águilas, zorros y jabalíes que conforman la fauna del lugar.
El itinerario que sugerimos se puede considerar el más representativo de la Sierra de Bèrnia. Para ello hay que tomar la pista de tierra hasta llegar a un cruce señalizado como PRV-7 Bèrnia, donde hay que escoger la pista de la izquierda hasta llegar, pasados 15 minutos, a la Font de Bèrnia. Es allí donde hay que aprovechar para aprovisionarse de agua ya que la fuente dispone de un caudal constante todo el año.
Por la parte superior izquierda de la fuente, hay que continuar por el sendero señalizado regularmente con dos líneas paralelas, una amarilla y otra blanca.
Este sendero llevará al excursionista hasta las paredes de la cresta, donde se encuentra un pequeño abrigo natural, con abundante vegetación húmeda, ya que esta es la zona de umbría.
Con un nivel más pronunciado hay que continuar el camino hasta llegar, pasados 45 minutos, al Forat. Esta es una oquedad natural abierta en la roca. Es un pequeño túnel que comunica las dos caras de la montaña, con una longitud aproximada de 20 metros y cuya altura mínima es inferior a 1 metro, obligando a pasarlo casi arrastras.
Al pasar al lado Sur, sorprende la altura y amplitud de la bóveda, que se acentúa por la diferencia de luminosidad entre la cara Norte y la Sur.
En todo este trayecto se puede divisar una extensa zona de la Marina Alta con algunas de sus montañas, como la Sierra del Ferrer, El Montgó y La Solana, y poblaciones entre ellas Benissa, Benitachell y Teulada-Moraira, y si hay suerte y el día está claro y despejado se podrá divisar la isla de Ibiza.
Desde el otro lado del Forat se divisa un paisaje abierto al mar, completamente diferente al de la vertiente Norte, y que permite admirar una vasta extensión de la Marina Baixa, destacando montañas tan emblemáticas como Aitana, Puig Campana, Ponoig y la Serra Gelada, poblaciones netamente turísticas como Altea y Benidorm. En días claros se puede alcanzar a ver toda la costa hasta Santa Pola e incluso la Isla de Tabarca. Desviando la vista hacia la derecha, se observan las poblaciones de Callosa d´En Sarrià, Polop y La Nucía.
Tras 1 hora y media de ruta hay que continuar por el camino hacia la derecha, siempre siguiendo las marcas amarilla y blanca indicativas del PRV-7 Bèrnia, el sendero les llevará por la ladera en dirección hacia el oeste, descendiendo hasta una pedriza que hay que cruzar con precaución, llegando a unas terrazas en las cuales se encuentra el Fort de Bèrnia. Construido durante el reinado de Felipe II (1.562), para controlar y sofocar las revueltas de la población morisca, mayoritaria en estas sierras. Una vez expulsado los moriscos, en 1609, el fuerte quedó abandonado. En la actualidad quedan restos de las bóvedas y de los muros del foso.
Cabe destacar que antes de llegar a estas ruinas, a unos 50 metros por debajo del camino, hay una fuente en forma de abrevadero que también se puede visitar.
Una vez allí, desde la parte superior del Fort y continuando hacia el oeste, se emprenderá el camino de regreso a Les Cases de Bèrnia. Alrededor de 30 minutos por un sendero que asciende suavemente hasta un pequeño collado. Emprendiendo la bajada por la senda y siempre siguiendo las marcas, se llega al punto de partida, Les Cases de Bèrnia.
Durante este trayecto, por la parte Oeste, se puede divisar perfectamente la Serra del Ferrer y las localidades de Bolulla y Tàrbena.
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