Toni Serra Crespo competirá para alzarse con el triunfo con 49 participantes más llegados de toda España en la la décima edición del concurso Premio Promesas Le Cordon Bleu

Tanto el campeón como el subcampeón, recibirán una beca para estudiar en esta prestigiosa escuela de alta cocina madrileña. Y este año, por primera vez, se premiará con 2.000 € a cada uno de los finalistas restantes.

Nosotros ya tenemos a nuestro favorito y en unos días le apoyaremos votando el vídeo que encontraremos en YouTube en el que se valorará la creatividad y las técnicas utilizadas, pero también nuestros votos. De ahí, que os animemos a todos a apoyar a nuestro protagonista a que alcance sus sueños.

TONI SERRA CRESPO

A sus 23 años la cocina es su pasión. Este joven empezó en 2018 el Ciclo Formativo de Grado Medio de Cocina y Gastronomía en el IES María Ibars de Dénia hasta el 2020 que da continuidad a sus estudios con el Ciclo de Grado Superior de Dirección de Cocina en el IES Guillem d’Alcalà en la Pobla de Farnals, donde actualmente estudia el segundo curso. Y si miramos su experiencia profesional, empieza al lado de su madre en la Bocatería Racó y poco después realiza sus prácticas en Cuina de 2 también de Benissa.

Hemos querido pasear con Toni por su Benissa natal y ya que es un buen cocinero, lo hemos hecho a la hora de comer. En ese momento en el que al pasear por las calles benisseras el aroma a puchero o paella invaden nuestros sentidos.

Enhorabuena Toni Serra Crespo. ¿Cómo llegas al concurso Premio Promesas de Le Cordon Bleu?

Muchas gracias. Pues llego a este concurso por los profesores que colgaron la información en el instituto y nos comentaron que podrían participar cinco alumnos. Me lo estuve pensando hasta última hora, de hecho, le dije a mi profesora que me apuntase el día que se cerraban las inscripciones.

¿Qué significa para ti ser uno de los escogidos en la semifinal?     

Sin lugar a dudas, una muestra de superación personal. Yo no me veía capaz, pero ahora sé que lo voy a dar todo. Es un placer poder participar.

Para nosotros ya eres un ganador, pero no sabemos cuál será la decisión final. Si miramos a un futuro ¿A qué aspiras?

A finalizar los estudios y a ganar el concurso. Pase lo que pase, seguiré estudiando. También me gustaría abrir mi propio local y ser reconocido, a ser posible con una Estrella Michelin y en mi pueblo. Y no descarto tampoco dedicarme a la docencia y enseñar mis conocimientos a los alumnos.

¿Cómo llegas al mundo de la cocina?

Llega un momento en el que no sé si irme a la universidad o estudiar cocina, ya que, desde pequeño, al tener mis abuelos restaurante y mis otros familiares también dedicarse a este sector, me gustaba, aunque también tenía en mente estudiar otra de mis pasiones, la música. Trabajando al lado de madre, me decanté por la cocina, aunque ella me dijo que “estaba loco y no sabía lo que hacía” pero que si era lo que me gustaba que adelante.

Hablando de cocina ¿cuál es tu plato preferido y el que no te gusta? Y, si hablamos de ingredientes ¿tienes uno que no puede faltar en tus platos y otro con el que no te guste cocinar?

Mi plato preferido… podría decirte que cualquier arroz o fideuà con los que disfruto siempre comiendo. Y lo que no me gusta son las legumbres, las lentejas o un plato tan típico benissero como es la “fava pelà”, pero si hay que comerlas, se comen.

En cuanto a los ingredientes, las espinacas o acelgas, verdura de hoja, no termina de gustarme mucho, pero, poco a poco, desde que estudio cocina que me gustan más. Y el preferido, no podría decirte, aunque donde esté un tomate del terreno con un poco de aceite y sal, es lo mejor.

Ya que hablamos de tus preferencias, ¿cuál es el plato benissero que más te gusta?

Ahí tengo una gran duda. Estoy entre las cocas que me enseñó a hacer mi abuela o el puchero de polp. No sé cuál escoger.

Se nos ha abierto el apetito, así que casi podríamos irnos y sentarnos en la mesa. ¿En tu casa quién cocina? ¿Qué te gusta más ser anfitrión o invitado?

Por suerte o por desgracia, en mi casa cocino yo, aunque mi hermano también es un “cocinitas”. Eso sí, prefiero ser invitado a pesar de que siempre con mis amigos me toca hacer a mí la paella.

¿Sabes que el mundo de la cocina no es un camino de rosas?

Claro que lo sé. Yo empecé en la cocina como una afición por mi abuela, al llegar a casa siempre me ponía a su lado a cocinar y ahora es mi pasión. Es un oficio duro, pero ver la cara de los comensales cuando prueban tu plato se convierte en la mejor recompensa.

ENHORABONA TONI

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