Desde tiempos inmemoriales el sombrero siempre ha adornado las cabezas de muchos hombres para dar cuenta de su condición social y gusto individual. Un complemento que durante décadas estuvo en auge y tuvo su boom entre hombres y mujeres que los lucían como una prenda más. Una tradición que esta empresa de Gata, Sombreros Signes, conoce muy bien, ya que llevan 50 años de tradición viva donde el método artesanal siempre ha prevalecido ante la evolución.

Con ganas de conocer este oficio tan antiguo y la historia que esconde esta empresa que hoy en día ha traspasado las fronteras El Mirall de la Marina se desplazó hasta la calle Lepanto de esta localidad. Allí nos esperaba José Signes, codirector gerente junto a su hermana Antonia, y con él conversamos y conocimos todos los entresijos de su fabricación.

Porque no todos los días su producto estrella, el sombrero conocido como el Panamá, sale en un videoclip de un grupo español La Oreja de Van Gogh. En una secuencia luce esta obra de arte fabricada en paja toquilla de Sombreros Signes. José Signes nos explica que esta idea nace desde el gobierno de Ecuador, colaboradores de esta empresa, para posicionar este sombrero y a través de Sony Music lanzan acciones de imagen como esta.

Unos sombreros que también han lucidos otros cantantes como Efecto Pasillo, Raquel del Rosario, periodistas, Jefes de Estado de muchos países o personalidades relevantes, y han salido de esta empresa de la Marina Alta.

Pero ¿Cómo nace esta empresa? Conversar con José Signes es viajar al año 1968 cuando su padre y tío José y Francisco Signes fundaron un pequeño taller de sombreros al estilo mexicano de paja enfocado al turismo, en una época donde el 90 por ciento de la fabricación de sombreros en España salían de fábricas de Gata y Pedreguer.

En la época de los 80, especifica este empresario, “los hermanos se separaron y mi padre siguió con el negocio y empezó a innovar y principios de los 90 comenzamos a trabajar con el sombrero Panamá cooperando con el gobierno de Ecuador y a incrementar el personal en la empresa”.

En total, hoy en día trabajan 18 personas directamente e indirectamente otras 12, siendo el producto estrella y el que le ha dado la fama internacional el sombrero Panamá, pero ¿qué le caracteriza y cómo se fabrica?

Signes nos explica que este sombrero está fabricado con paja toquilla tensada en Ecuador, tradición hecha arte declarado por la Unesco patrimonio cultural inmaterial de la humanidad. “Importamos la materia prima, la base, y en nuestra fábrica de Gata le damos la forma, el planchado, el diseño y el acabado”, subraya.

La cadena de fabricación es muy costosa, ya que comienza desde el cultivo de la Paja Toquilla (Carludovica Palmata) en este país andino, donde allí se recolecta, se selecciona, se limpia, se teje y se tinta. Y se exporta a este taller en forma de campana y los trabajadores de forma artesanal le dan la forma, repuntes, detalles, en definitiva el acabado para su venta.

Unos sombreros con una línea media-alta cuyos precios oscilan desde los 90 a más de 5.000 euros. En total al año confeccionan unos 35.000 sombreros y el 70 por ciento se exportan a otros países como Inglaterra, Portugal, Francia, Bélgica, Holanda, EEUU o Hong Kong, y en España a sombrererías de grandes capitales.

Un auténtico arte el de tejer sombreros de estas características donde el diseño y la calidad priman en todos ellos, pero sobre todo el amor por este oficio tan antiguo e importante. Y en Sombreros Signes Gata continúan con esta herencia familiar que viste ahora a muchas personalidades.

50 años de un largo camino con muchas historia aún por contar…