Marina González es boxeadora y Maya Weug piloto, pero ambas, además de ser benisseras, comparten entrenador y acuden casi a diario al Sifre Gym, la fábrica de campeones.

Dos campeonas que siguen sumando triunfos haciendo realidad el dicho de que todo esfuerzo tiene su recompensa.

En el caso de Marina González acaba el año proclamándose Subcampeona de España de Boxeo Olímpico en su categoría y ahora se prepara para alzarse con el oro en el Campeonato de la Comunitat Valenciana.

Para Maya Weug, el 2019 tampoco lo olvidará, ya que se llevó el premio de la FIA Women in Motorsport un merecido galardón. Ahora para el año nuevo aspira a poder subirse al podio en las carreras de karting internacionales y ya puesta a pedir hacer el salto a los monoplazas.

Siguiendo con nuestro objetivo de apoyar a nuestros vecinos, en www.elmiralldelamaria.es, hemos hablado de ellas en varias ocasiones, pero hoy queremos hacerlo con quien mejor las conoce deportivamente hablando, Carlos Sifre.

Hoy queremos que su coach nos describa cómo son nuestras dos campeonas. Las mismas que llevan el nombre de Benissa orgullosas allá donde van.

Carlos, ante todo nuestra más sincera enhorabuena. ¿Qué nos podrías decir de Marina González?

Bueno muchas gracias. Pues de ella os puedo decir que es la alumna perfecta, atenta, inteligente, paciente y gran persona. Y como deportista no tiene límites.
Han sido 3 años muy duros tras una lesión que le apartaron del ring por la que hemos tenido que entrenar muy diferente al resto para estar competitivos.

Creo que estamos formando a una futura campeona con mayúsculas y que lo mejor está por llegar.

Y si me permitís, quiero dirigirme a ella para darle mi enhorabuena por ser como es. Para mí, es privilegio tenerla en mi equipo.

Bonitas palabras sobre Marina que seguro también las tienes para Maya, ¿No es así?

Efectivamente. Llevamos muchos años trabajando juntos y es la alumna y persona más disciplinada y perseverante que conozco con diferencia. Yo siempre presumo de ella entre cambio de clases, la llamo “mi soldado” entre risas.
Tiene todo el potencial necesario para conseguir lo que se proponga, aunque su hándicap es, y como muchas veces lo hablamos, no todo no depende de ella porque gran parte de su trabajo depende de un motor.

Respecto a lo deportivo: reflejos, fuerza, estabilidad, equilibrio… es la más fuerte de la parrilla con diferencia. Por ella pongo la mano en el fuego.

Estoy feliz de poner mi granito de arena, ORGULLOSO es una palabra muy pequeña para describir todo lo que siento.

Aquí tenéis el merecido homenaje a estas dos benisseras que soportan la dureza de su entrenador quien les repite una y mil veces “en vuestro deporte, no se juega”.  Una piloto y una boxeadora a las que deseamos que en este 2020 hagan su mejor carrera y den su mejor golpe.