Muchos de nuestros vecinos darán la bienvenida al 2016 a muchos kilómetros de su pueblo natal
Este reportaje ha contado con nuestros colaboradores de la Marina Alta Raúl Martínez y Nuria Moncho.
Son muchos los valencianos que en estas fechas navideñas se ven obligados a pasarlas muy lejos de sus hogares, de su tierra, de la comarca de la Marina Alta, repartidos por el mundo y a miles de kilómetros de sus municipios, echando mano del teléfono o del socorrido Skype para estar un poco más cerca de los suyos. El Mirall de la Marina ha querido saber cómo pasarán el último día del Año en el país que un día emigraron y que fueran los protagonistas de estas bellas historias.
AMADEU VIVES
Licenciado en Bellas Artes y natural de la localidad de Pedreguer, dejó su tierra y tomó rumbo a Finlandia. A un lugar donde conoció años atrás a su mujer Veera tras disfrutar de una Beca de Erasmus. Los dos regresaron a España donde vivieron unos 5 años, pero en el 2014 tras la situación laboral existente, el pesimismo, la frustración y el engaño, en gran parte por el sistema político, buscaron un lugar mejor donde vivir y fijaron su residencia en Nastola, una ciudad situada a unos 100 kilómetros al norte de Helsinki.
Conoció a su mujer en Finlandia, pero volvieron a España ¿a qué se debió?
Sí, tras disfrutar de mi beca de Erasmus durante 9 meses volvimos los dos juntos a Valencia, Veera vino como alumna de intercambio, y tras finalizar sus estudios en diplomatura en Diseño de Productos y Comunicación Visual decidimos ir a vivir a mi pueblo, Pedreguer, y empezar a trabajar de lo que habíamos estudiado los dos.
¿Cómo fueron esos años?
Al principio, Veera tiró curriculum en aquellas empresas relacionadas con su sector, pero no hubo suerte. Mientras, tanto yo me alquilé un local cerca de mi casa para ir trabajando de escenógrafo y realizar mis proyectos artísticos como autónomo. Recuerdo esos primeros años, pocos proyectos y muchas facturas que pagar. Una época muy difícil.
Mi mujer encontró trabajo en la recepción de un hotel, si bien, recuerdo que muchas veces había que pedir ayuda a los padres para salir adelante. Al vivir en el pueblo cerca de ellos, siempre sonaba el teléfono para decirnos: “Hem fet putxero. Voleu caldo?”.
Primeros años difíciles, y sobre todo para su mujer también ¿Cómo fue la adaptación?
Tras unos años trabajando en el hotel, decidió estudiar en la UNED el Grado de Pedagogía, y los primeros años obtuvo una beca de materiales. Pero eso se acabó debido a los ajustes presupuestarios y a la crisis económica, por lo tanto no recibiría más ninguna beca ni tampoco asistencia sanitaria, ya que era una emigrante sin trabajo. Sin embargo, mi empresa tras 5 años empezaba a funcionar a buen ritmo entre proyectos escenográficos, organización de espectáculos, pinturas, diseños, gráficos, organización de cursos, clases de pintura o animación con arena.
¿Cómo deciden tomar rumbo a otro país y dejar Pedreguer?
El fantasma del paro amenazaba cada vez más la salida laboral de Veera y poco a poco la idea de cambiar de país iba haciéndose más patente. La situación social de pesimismo, frustración y de engaño también influyó mucho para buscar un lugar mejor. Así llega el 1 de agosto de 2014.
Que toman el avión, ¿no?
Sí. Tomamos el vuelo procedente de Alicante a Helsinki y comienza una nueva etapa, una nueva etapa desde 0, pero con la seguridad que Veera era finlandesa.
¿Cómo fueron esas primera semana?
Las primeras semanas fueron muchas las visitas a organismos oficiales, policía, judicial, social con el objetivo de regularizar nuestra situación en Finlandia. Una vez toda la burocracia realizada pude optar a las ayudas del gobierno. Por lo que, estuve en el programa de integración para emigrantes lo que me permitió estudiar la lengua, aprender la cultura y la historia del país.
En la actualidad, ¿contentos con el cambio?
Veera está trabajando de maestra de escuela haciendo unas sustituciones para obtener pronto el Máster de Maestra, mientras yo estoy estudiando para Atrezzista para cine, teatro y televisión en una escuela de formación profesional. Además, de perfeccionar mis habilidades con la lengua finesa. Todo lo que hemos vivido tanto en España como en Finlandia nos ha hecho mejores. Hemos vivido felices dentro de nuestras posibilidades. Son todas esas buenas y no tan buenas experiencias que no las cambiaría por nada.
¿Cómo pasarán el último día de este año 2015?
La Nochevieja la pasaremos en Helsinki. Estaremos unos días por la capital con unos amigos de Veera. Haremos sauna, cenaremos y beberemos buena cosa, y si no hace mucho frío y estamos en condiciones, iremos a ver los fuegos artificiales desde la plaza «Senaatin Tori» .
¿Qué le pide al 2016?
Le pido paz y sostenibilidad. Pienso que los radicalismos en todas su variantes provocan violencia y la falta de sensibilidad por el medio ambiente y como consecuencia el aumento de contaminación provocan enfermedades. Estas se pueden curar con un mayor sentido común y educación.
CATERINA VALLÉS SALORT
La teuladina Cati Vallés se trasladó a Londres hace tres años. Una aventura que vino tras pasar unas vacaciones en la ciudad del té y el “fish and chips” y se enamoró de ella. Se propuso que tras finalizar sus estudios en España volvería para vivir una temporada y así aprender el idioma.
Acabaste tus estudios en Relaciones Laborales y pusiste rumbo a una de las ciudades más cosmopolita, turística y fascinante.
Sí. La verdad es que tras conocerla en una visita me enamoró, evidentemente no en cuanto al tema gastronómico, pero sí en cuanto a sus lugares, monumentos, jardines, calles, rincones, etc. Pero en ese momento estaba cursando mis estudios universitarios, y cuando los acabé, me fui para aprender el inglés y vivir una temporada aquí.
¿De qué trabajas?
Actualmente, no trabajo en nada relacionado en lo que me formé, ya que soy Assistant Manager en una cadena de cafeterías. Un trabajo que lo empecé como todo aquel que llega a un país extranjero y no conoce demasiado bien el idioma, aunque me encuentro muy bien y me divierte mucho hablar con los clientes.
Tres años ya en Londres, ¿Cómo será esta Nochevieja?
Será como la vívida en los últimos años que estoy aquí. Nos juntaremos los amigos en casa de una amiga, cenaremos y haremos la fiesta allí. Estos días aquí hay muchísima gente por todos los lugares y es muy incómodo y caro salir de fiesta.
Recuerdo que el primer año fuimos a ver los fuegos artificiales musicales que hacen donde está el Big Ben, pero al finalizar fue toda una aventura desplazarse por la ciudad por la cantidad de gente que hay. Por eso, desde hace dos años, que nos juntamos en casa de algún amigo y nos organizamos nosotros la fiesta.
¿Qué deseo le pedirías al año que está a punto de arrancar?
Desearía que todo, al menos, se mantuviera como ahora. De momento soy feliz como estoy, tengo buenos amigos en Londres y viajo al menos de tres veces al año a Teulada para visitar a mi familia y amigos. Evidentemente, podría pedir más cosas, ya que hay algunos aspectos que podrían mejorar, pero me sobra si me mantengo como estoy ahora, viviendo una experiencia inolvidable y conociendo a muchas personas de diversas culturas. Así que desde Londres os deseo a todos un Feliç i Pròsper Any nou!!
TONI MARÍ BLASCO
Desde México D.F se encuentra Toni Marí Blasco, periodista, natural de la localidad de Ondara. Hace cuatro años que decidió tomar un nuevo rumbo a su vida obligado por la crisis y la desesperación de no encontrar trabajo en este mundo de la comunicación. Y se marchó a más de 10.000 kilómetros de su tierra y con un objetivo claro: encontrar trabajo.
¿Desde cuándo está en México?
Estoy en México desde septiembre de 2012.
¿Qué le hizo marchar?
Vine por la crisis, ya que no encontraba trabajo tras perderlo en Canal 9. Mi propósito y mi lucha fue encontrar un nuevo empleo en esta enorme ciudad. Tras pasar mis primeros años, habituarme a esta ciudad, a sus gentes, clima, comida, etc. Ahora estoy más feliz, me he casado con una mexicana y llevo la comunicación de una marca de motos.
¿Cómo vivirá el fin de Año?
Lo pasaré con mí mujer y su familia.
¿Cuáles son sus deseos para el próximo año?
Para el nuevo año 2016 solo deseo encontrar un nuevo trabajo para volver.
KUKI PASTOR MONCHO
La peluquera Kuki Pastor Moncho es vecina del Poble Nou de Benitatxell y, aunque acaba de pasar unos días estas Navidades en su pueblo natal, pasará el fin de año en Buenos Aires donde ha fijado su residencia junto a sus dos hijos y su marido. Un nuevo país al que viajó debido a cómo estaban las cosas en España donde solo podían subsistir, tratar de pagar las facturas y poco más y donde decidió darle el sí quiero a su esposo Juan.
¿Desde cuándo vive en Buenos Aires?
Desde octubre de 2013, hace ya más de dos años.
Dejó su casa, familia y amigos ¿Qué le hizo tomar esta decisión?
Con 38 años nos parecía que estábamos en pleno crecimiento laboral y personal para conformarnos con eso, así que tras hablarlo y gestionar todo, tras 9 meses de papeleos y cerrar nuestra casa llegamos a Buenos Aires.
¿Cómo fueron sus primeros días en este nuevo país?
A Juan le esperaba un nuevo trabajo y a mis hijos, de 12 y 8 años, les esperaba un nuevo colegio y unos nuevos compañeros. Yo, en cambio, llevé mi curriculum a una peluquería que me habían recomendado. Leo Paparella, un reconocido peluquero que no tardaría ni un una semana en mandarme las cámaras de televisión para que saliera en un programa de moda. Poco tiempo después cuenta conmigo para que dirija sus campañas y esté en los shows que ofrece para profesionales del sector en el escenario junto a él.
Podemos confirmar que ¿está contenta de la decisión tomada?
Por su puesto. Como proyecto familiar vemos que nuestros hijos tienen oportunidades diferentes de las que les podríamos haberles ofrecido ahí, además tropezamos con gente maravillosa a quien hoy llamamos amigos/familia que nos facilitaron nuestro principio en esta ciudad.
¿Cómo vivirán el fin de año?
Rodeada de mi familia y amigos aquí en esta nueva tierra y, gracias a las nuevas tecnologías, con los que están a unos cuantos kilómetros pero que llevamos en nuestro corazón.
Y por pedir ¿Cuáles son sus deseos para el nuevo año? No sabría que pedir, la vida nos ha ido regalando demasiadas cosas últimamente, y no hay que abusar (Risas). Os deseo éxito en vuestro nuevo proyecto El Mirall de la Marina.
Sea como sea, regresando a casa o a miles de kilómetros de distancia, estas fechas muestran que “el recuerdo, como una vela, brilla más en Navidad”, como decía el escritor Charles Dickens, creador del más famoso ‘Cuento de Navidad’, para quien deben ser unos días felices que «hacen que nos acordemos de las ilusiones de nuestra infancia, le recuerden al abuelo las alegrías de su juventud y le transporten al viajero a su chimenea y a su dulce hogar”.
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