En unos días, y dentro de la programación de la Fira i Porrat de Sant Antoni de Benissa, tomarán la calle los vehículos clásicos y de época. En nuestro reportaje vamos a conocer una de las joyas de la corona: un vehículo que durante mucho tiempo ha sido el objetivo de centenares de flashes de las cámaras de los amantes de las cuatro ruedas.

Les hablamos de un Ford TT del año 1915 que esconde una hermosa historia.

Unas nostálgicas líneas que nos darán a conocer al coche y a su protagonista, Andrés Giner, quien adquirió este Ford totalmente en ruinas para restaurarlo y así rendir homenaje a su padre, Bartolo Giner, uno de los primeros taxistas de la localidad.

Cuando Bartolo compró su nuevo coche, bueno un chasis y un motor llegado de los Estados Unidos, mucho tuvo que trabajar para adaptarlo a sus necesidades. Un taxi que hacía más próxima la estación de tren, el médico y tantos sitios que, dada la carencia de medios de locomoción de la época, resultaban casi inaccesibles.

El coche marcó un antes y un después en la vida de Andrés quien compró los restos de un coche del mismo modelo y así convertirlo en una auténtica obra de arte digna de los mejores coleccionistas.

Andrés compaginó su trabajo en el conocido Rent a Car Giner y su vida familiar, con su hobbie. Tras muchos años de trabajo, y conociendo lo perfeccionista que él era, su sueño se hizo realidad.

Este clásico del motor seguro lo tienen grabado en sus retinas muchos vecinos siendo unos auténticos privilegiados de poder admirarlo o montar en él. Ya que desde el fallecimiento de Andrés sus hijos, quienes nos han contado esta bella historia, lo guardan como oro en paño y no ha vuelto a salir. Aunque aseguran, volverán a mostrarlo a la gente en próximas ocasiones.

Como se suele decir una imagen vale más que mil palabras y con una de ellas queremos finalizar nuestro reportaje, ya que si la historia es curiosa esta también lo es.

Recrear fotos de padres con hijos, escenas de los antepasados está de moda y se convierte en viral en las redes sociales. Pues bien, nuestro protagonista Andrés Giner ya lo hizo mucho antes de aparecer Facebook o Instagram. La vieja instantánea donde aparecía Bartolo en su radiante taxi con sus amigos (el Tío Pebrereta, Ramón l’amblanquinaor y Joaquín el Gato) fue emulada por su hijo Andrés junto a su hermano Manuel y los hijos de ambos.