Este jueves 15 a las 19:30 horas, en l’Espai Cultural Cases del Batlle y dentro de la campaña Llibres a la primavera, José Luis Luri presentará su primera novela, Morent (Editorial Última Línea, 2025). Con esta obra, el escritor alicantino, reconocido por su labor investigadora en la historia local de la Marina Alta, da el salto a la ficción, construyendo un universo literario donde el pasado nunca deja de hablar.

Un pueblo atrapado en su historia

En Morent, Luri nos transporta a una villa imaginaria enclavada entre barrancos y tradiciones, donde los ecos de la historia resuenan en cada rincón. Salvador Mengual, conocido como Voret, es el heredero de un legado familiar marcado por disputas ancestrales y tensiones soterradas entre los Martell y los Menjeta. Mientras intenta reconciliar su vida moderna con las raíces de un pueblo que se resiste al cambio, enfrenta pérdidas personales, crisis financieras y la desconexión con sus propias ambiciones.

La novela no solo sigue la vida de Voret, sino que se adentra en las historias de sus antepasados, explorando dinámicas familiares, mitologías locales y los efectos de la Guerra Civil Española en la identidad del pueblo. Con una prosa que alterna lirismo y sarcasmo, Luri construye un relato coral donde cada personaje aporta una pieza al rompecabezas de Morent.

La voz de un historiador convertido en novelista

José Luis Luri ha dedicado gran parte de su trayectoria al estudio de la historia local de la Marina Alta. Coautor de la trilogía Calpe, tierra y almas, ha publicado numerosos ensayos sobre genealogía, etnografía y política municipal. Su trabajo más reciente, República y guerra en Calp (1931-1939), profundiza en un periodo convulso de la historia española.

Ahora, con Morent, Luri inaugura una nueva etapa en su carrera literaria, utilizando la ficción como herramienta para explorar la memoria y la pertenencia. Su estilo, que mezcla documentos apócrifos, chismes orales y crónicas socioeconómicas, convierte la novela en un mosaico de voces donde ninguna versión es definitiva y todas son necesarias para intuir la verdad.

Un libro que deja huella

Morent no busca moraleja ni consuelo, sino que invita al lector a escuchar el eco de historias que, de alguna manera, le resultan familiares. Cerrado el volumen, queda la sensación de haber respirado un aire de recuerdos ajenos y, a la vez, extrañamente propios. Porque, como nos recuerda Luri, todos venimos de algún Morent, aunque tardemos media vida en admitirlo.