Mientras que en 1992 nacía nuestro protagonista, sonaban en las radios y discotecas, los mejores temas del grupo valenciano Los Inhumanos extraídas de su primer directo “Directum Tremens”. Quién les iba a decir que, un mes de agosto de hace ahora un año, sus caminos se unirían.

En El Mirall de la Marina hemos querido conocer, más a fondo, a Juan Rivera Montoro, un benissero de 24 años que en enero finaliza sus estudios de Derecho y que, ahora en verano, trabaja como socorrista.

Se define como un loco de los coches, amante del rap, que aprovecha el máximo tiempo con sus amigos, su familia y su novia. Además, le gusta hacer e experimentar cosas nuevas, viajar y todo lo que le aporte cosas positivas.

Primero que nada, y para empezar nuestra entrevista ¿alguna vez se te había pasado por la cabeza dedicarte al mundo de la música?

Pues sí, pero no como Inhumano. La verdad es que me gusta mucho la música, he escuchado todos los estilos musicales posibles (con 9 años tenía música que iba desde la clásica hasta el bakalao… Jaja), pero mi estilo favorito es el rap, lo escucho a diario e incluso compongo y grabo mis propias canciones, solo o con amigos, que posteriormente subimos a nuestros canales de YouTube por hobbie. Así que en cierto modo sí me dedico entre comillas a la música, pero a mi modo y de forma personal. Lo que jamás imaginaba era acabar en un escenario con un grupo mítico con 36 años de carrera ininterrumpida, cantando y bailando canciones que nos sabemos todos, e incluso rapeando con ellos. Una pasada.

No podemos continuar sin preguntarte ¿cómo llegas a Los Inhumanos?

Yo entré como socorrista hace cuatro años en una urbanización en la cual, caprichos del destino, veranea el vocal y líder de la banda, Sergio Aguado. Pasa el tiempo, repito años trabajando allí, hacemos migas y un día, de sopetón, me suelta: “Oye Juan, te quería comentar una cosa… ¿Tú te vendrías con nosotros de bolos?” Más o menos fue así, y ya imagináis la respuesta que le di… Jaja. Un año después sigo aquí dando guerra con ellos.

Los Inhumanos empezaron cuando aún no habías nacido, eres muy joven ¿conocías el grupo?

La pregunta es ¿quién no los conoce? Sí que es cierto que mucha gente no conoce el grupo como tal, por su nombre, pero seguro que ha cantado sus canciones de fiesta. Yo los conocía por las canciones y por alguna actuación por los alrededores. Por eso cuando Sergio me ofreció entrar, ni me lo pensé.

Tus padres, de fiesta, seguro bailaron muchas veces sus canciones ¿cómo reaccionaron cuando se enteraron de qué su hijo iba a formar parte del grupo?

Primero sorpresa y después entusiasmo. Mientras siguiese estudiando y lo pudiese llevar todo, todo bien… Jaja.

Con Los Inhumanos la fiesta está garantizada y arriba del escenario un buen puñado de gente ¿cuál es tu papel en el grupo?

Me dedico a bailar y a cantar, sin micro, a hacer fiesta y reproducir las coreografías como el resto de mis compañeros para enganchar al público.

Normalmente actúo como troglodita, salvo cuando acude con nosotros nuestro Bestiajez, de quien empiezo a coger el relevo. Además, en concreto, me encargo de gritar el nombre del pueblo o ciudad donde actuamos eructando en el tema «Western mix», canto un pequeño rap en el tema «Manué no te arrime a la paré» y en el último concierto hice de «Maroto», un personaje que tenemos en el tema «Tírate de la moto», que acaba volando y saltando al público.

¿Cómo describirías vuestros conciertos?

Inhumanos jaja. Aunque esté mal que lo diga yo, son brutales. Quien nos ha visto puede dar fe de lo bien que lo pasamos, tanto el público como el grupo. Es una constante interacción con la gente, tanto que bailamos todos juntos al unísono e incluso parte del público acaba subiendo al escenario y parte del grupo acaba bajando con su público. Siempre buscamos divertir a todo el mundo con humor, diversión y muy buen rollo.

A pesar de que es un grupo que alcanzó varios números 1 en los 80, no han parado de ofrecernos su música, sus conciertos y sobre todo mucha fiesta ¿cómo se presenta el verano inhumano?

Pues movidito, hemos tenido bastantes conciertos y aún nos quedan bastantes más de cara a final de verano, aunque la cosa no acaba ahí, sino que seguimos tocando durante todo el año. La odisea de actuar durante 36 años de forma ininterrumpida, continúa.

Algunos son los que conocen tu faceta artística, pero ahora con nuestro reportaje muchos más son los que la descubrirán ¿cómo crees que reaccionarán?

Imagino que con extrañeza, como los que la descubrieron antes. Supongo que llama la atención que, de repente, un conocido tuyo esté en un grupo con tanta trayectoria.

Cuando Rocío Cabrera formaba parte de Sweet California, actuaron en Benissa, ¿te gustaría también actuar en tu pueblo?

Claro. Actuar en casa debe ser especial, aunque también un poco raro, por el hecho de ver a los tuyos desde la tarima. De cualquier modo debe ser impresionante, así que… ¡Festeros 2017, traednos! Jaja.

Y por último, si hablamos de planes de futuro, ¿cuáles son los tuyos?

Ser feliz y fiel a los míos y a mí mismo. Ese es mi verdadero objetivo. En enero acabo la carrera y realmente no sé a qué dedicarme después. Tengo muchas ideas y cuando llegue el momento decidiré, pero lo que tengo claro es que lo que haga debe llenarme y hacerme sentir satisfecho. Seguiré con los míos, con mis aficiones y mis hobbies, con todo lo que me aporte cosas positivas y, cómo no, con Los Inhumanos.

Con sus planes de futuro finalizamos nuestra entrevista, agradeciendo a Juan el haber compartido su magnífica historia con nosotros. Le deseamos toda la suerte del mundo y estaremos atentos a su trayectoria, como abogado o showman o, ¿por qué no? de las dos facetas.

Suerte!!!